Vahema Uncategorized TU COSECHA

TU COSECHA

TU COSECHA

TODOS LOS DIAS
TE MIRO
QUE VAS ACOMPAÑADA
DE UNA SONRISA
MAS PERFECTA
QUE EL SILENCIO.

NO HAY PRISIÓN
DONDE PUEDAN
ENCERRAR MI MIRADA,
NI CEMENTERIO
DONDE LA PUEDAN
ENTERRAR.

EN EL DESCANSO
DE MI SOMBRA,
VI FLORECER
LAS HUELLAS
DE LOS TIEMPOS.

LAS OLAS DEL MAR
AL LLEGAR A LAS ORILLAS
DEJABAN DISPERSADA
TU NATURALEZA DORMIDA.

AL MIRARTE
NUEVAMENTE,
ME SORPRENDE
TU PRESENCIA.

LLEGAS ACOMPAÑADA
CON EL VIENTO
Y LAS LLUVIAS.

ERES UNA NUBE
GRANDE
QUE ELVUELVE
EL UNIVERSO.

TRAES EL MISTERIO
DE TU VALLE.

LLEGA CONTIGO
LA LUZ
Y EN TUS OJOS
SE ESCUCHAN
LA QUENA
Y EL CHARANGO.

LAS HOJAS
FRESCAS
DE TU NACIMIENTO,
BAILAN ALREDEDOR
DE TU COSECHA.

VAHEMA
15 DE MARZO 2009
SUCRE BOLIVIA.
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LA BELLEZALA BELLEZA

LA BELLEZA
La belleza emerge
en la tierra, como
fruto esplendoroso
desde su nacimiento,
es una riqueza terrenal.
Esta impregnada
de todos los frutos
de la tierra, de su
aroma profundo,
de sus raíces, y del
secreto que guarda
el vientre
de la tierra.
Pero esta belleza pura,
incólume, absorbe
la indiferencia de los años
el caminar lento y pausado,
el desprecio de la mirada,
el dolor de las pisadas,
el abuso de las palabras,
la discriminación
por su naturaleza agotada,
el llanto silencioso
de los huesos.
Conforme transcurre,
el tiempo, los años,
se va convirtiendo
en una mercancía
que entra a la subasta
del mercado, es
absorbida por las
ganancias del dinero,
por la voracidad inescrupulosa,
la belleza se derrite y se
malgasta en las pasarelas del vicio
en los concursos efímeros
y truculentos de belleza.
La belleza se va envejeciendo,
en los mercados del placer,
en los abusos de los placeres
sexuales, allí acaba su lozanía,
su verdor y su vigor.
Allí la belleza es exprimida
para saciar las bajas pasiones
de los que se entierran
en la lujuria de la vergüenza
La vida se va deshilachándose
y su esplendor normal queda
envuelta en las silabas apretadas
de la tristeza humana.
Esas manos, ya no son
aquellas manos que
tocaban el cielo,
y construían la música
impalpable del amor.
Esos ojos vagan,
en el dolor impenetrable
del cansancio oculto
de las mejillas, que se
pierden en la sonrisa
pasajera y sobre los labios
majestuosos, que se quedan
desnudos, encendiendo los besos
donde se cultiva la
fragancia del amor
Lo que antes fue
belleza platinada,
hoy solo son arrugas
encarceladas.

Vahema Santa María

sabado, 18 de julio 2009

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