LA LUCHA

Las flores de tus ojos,
me enseñaron la lluvia,
a buscar en cada pétalo
de la vida
las hojas desnudas
de la opresión.
Caminé por el silencio
de tus palabras
y encontré
una flor que me llamaba.
Sus hilos de sangre
se perdían,
en la raíz de la tierra,
las huellas de su sombra
me hablaron en la noche,
y dejaron en mis manos
su camino de libertad.
Recibí en mis sentidos,
las voces de los enterrados,
sonaron sobre mis oídos
las gargantas de los fusilados.
En la piel suave de las flores
encontré las huellasde tus ojos,
y con los racimosde las hojas
recogí las manosquemadas
con las sílabas
ardientes
de la sangre
y de la pólvora.

Vahema

La Paz – Bolivia

2005

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EL CALOR DE TU SONRISAEL CALOR DE TU SONRISA

EL CALOR DE TU SONRISA

El tono de tu voz
castigó los contactos
oscuros del silencio.

Tus ojos percibieron
la mirada indeseable
pervertida del silencio.

Con tu susurro infinito
partieron las palomas
oscuras del silencio

El calor de tu sonrisa
se moja en la lluvia
oscura del silencio.

La furia de tus palabras
acabaron con el aliento
oscuro del silencio

La mentira y el olvido
conjugarion las emociones
oscuras del silencio.

Impalpable estaba tu corazón
tus manos mensajeras de la vida
atravezaron los precipicios
oscuros del silencio.

La sonrisa de tu cabello
navegó en los puertos
sublimes de tu verdad.

vahema santa maria

viernes 24 abril 2009

QUEBRADA HONDAQUEBRADA HONDA

Se desnudo la palabra

en el dolor de la sonrisa

es el valor del efecto

es la conquista del dialecto.

No es tampoco un sueño

la pasion no tiene dueño.

La palabra corre

por las petulantes aguas

de la hermosura.

Me encontre contigo

estaba bañado de sal y de azucar

sobre tu cuerpo abaleado

solo vi luces de esperanza

tu traias sobre los ojos de tu rostro

la dureza de la lucha,

el valor de tu sangre,

la luz de tu coraje,

venias cubierto

con las hojas del otoño.

Las venas de las huellas

nos cubrieron de primavera.

Alto dijo el miedo

y atras quedaban

los cinturones de miseria

La quebrada honda tenia

una sonrisa blanca,

las luces de sus musculos

apoyaban los combates

el trueno y la lluvia

se convirtieron en aliados naturales.

La firmeza de la letra invencible

era la marcha imparable

de los altivos guerreros.

solo pido que me des fuerza

para seguir escribiendo.

vahema

29 noviembre 2011

sucre bolivia.