Vahema Uncategorized DERZU UZALA

DERZU UZALA

DERSU UZALA

De la penumbra verde y oscura
apareciste como oso vespertino,
tu voz aguda se escuchó
desde la fogata clara
que atizaban los soldados
una noche de plenilunio

Balanceo lateral y encorvado
carga al lomo,
talle pequeño,
mirada felina,
cual puma hambriento,
o cual oso del bosque
buscando en el fuego
el calor de tu hogar perdido
o la carne diaria de la vida

Sentado al borde de la hoguera
atenuaste el cansancio,
tu larga pipa en mano
fue el rito de la reflexión diaria
y una bocanada profunda de humo
fue el eco fugaz
de tu pensamiento

El bosque era tu hogar,
cada paraje era familiar para ti,
los soldados asombrados
no podían creer
la agudeza de tu mirada
ni la percepción profunda
de las huellas
de cada pisada furtiva

Una noche te encontró el capitán
sentado en posición de loto
frente a una hoguera
de seca maleza.
Estabas hablando con tu esposa y tu hijo
y en cada llama azul
sentías el espíritu
de tus seres queridos
o la danza ritual
de amados espectros que acudían
a saludarte,

¡aquella noche de melancolía,
de evocación y de nostalgia!
Goldi grande,
de pequeña estatura,
sabio profundo del bosque,
son tus maestros los arbustos del campo
y también el viento del este,
El “amba” de medianoche,
la nieve,
los riachuelos y los estanques.

Arturo Villena
Primavera 2006

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CUANDO TU TE MARCHESCUANDO TU TE MARCHES

CUANDO TU TE MARCHES

Me pregunto?
Què serà de mi,
cuando tu tengas
que marchar a
otros cielos, hacia
otros ojos, a otra
eternidad.

Sin tì, la luz
no serà la misma.

Volveràn mis pasos
nuevamente solitarios
a pintar la bruma
de la noche, estrellarme
en el crepùsculo de la soledad.

Tù que has venido
desde tan lejos
y has construido
un edificio
con las hojas frescas
de tu silencio,
que pesan màs
que las aguas del mar.

Mañana no estarà tu rostro
ni tu cara bonita.

Los rìos profundos
se llevaràn tus huellas
y el aroma de tu cuerpo
caerà como lluvia
sobre las horas
del olvido.

A la hora de la hora
ya nadie estara conmigo
sòlo mis viejos pertrechos
leales y profundos
diràn su voz,
y la luz de esa historia
se apagarà para siempre.
v a h e m a
23 de mayo de 2009
SUCRE BOLIVIA