SILENCIOSILENCIO

SILENCIO

¡Silencio!
espetó
el carcelero,
cuando mil ojos
sujetaron, el
metal de la
muerte.
Oyeron pasos,
y golpes secos,
en la habitación
lúgubre, donde
las heces humanas,
son arrancadas
por el dolor.
Nadie guardó
sus sílabas,
tras el silencio
de las amenazas.
I las voces
despertadas,
por las bocas heladas,
y teñidas de sangre,
pronunció tu nombre,
Libertad se llamaba, y
alcanzaron
a tocar
mi corazón.
LASMA
L.P. 09.09.97
http://mundoalterno.com/decimas.decimas.htm